domingo, 13 de junio de 2010

JOSE GONZALEZ, un músico argonáutico.

JOSE GONZALEZ

Nacido en Gotemburgo, Suecia, en 1978, José González creció en un hogar donde la música siempre estuvo presente. Las influencias de la música latinoamericana heredadas de sus padres argentinos convivieron armoniosamente con los éxitos del pop y el rock inglés y norteamericano, y esa amplia y variada información musical forjó, desde pequeño, el camino a seguir por José. “En casa había una guitarra con la que solía jugar”, rememora González en una entrevista publicada en Internet. “En una oportunidad, mi padre me dio un enorme libro amarillo con acordes de Beatles y otros éxitos de la bossa nova. Me pasé todo el verano sacando temas. Y así fue como aprendí lo básico”.

Tras estos primeros pasos, José encontró su propia senda, inicialmente tocando el bajo en una banda punk, antes de flirtear con el hardcore y el indie rock. Aunque esto de saltar de un género a otro finalmente lo devolvió a la guitarra clásica, y luego de una serie de lecciones de flamenco, a la génesis de su personal estilo. “Quiero que la guitarra sea algo más que un instrumento”, confesó. “Durante bastante tiempo toqué música clásica tanto como flamenco. El flamenco es especial en su toque y en su ritmo, a pesar de una cierta monotonía. Mi manera de tocar la guitarra es una mezcla de todo eso: bossa nova, Beatles, flamenco y clásico”.

Vocalmente, admite la influencia del tono intimista de nombres de la talla de Chet Baker, Elliott Smith y Geoff Farina y reconoce, con satisfacción, el efecto positivo que en su música le ha dado el escuchar a artistas como Cat Power, Tortoise y Joy Division.

Con todo este bagaje musical encima, José debutó como solista en el 2003 con el simple Crosses. El éxito en Suecia y en los otros países escandinavos pronto se trasladó a Inglaterra, donde un sello independiente londinense, Peacefrog, lanzó un EP de cuatro temas (también titulado Crosses) a modo de presentación. Corría febrero de 2005 y la prensa especializada ya daba muestras de veneración hacia el músico sueco de ascendencia argentina. De todos modos, la conquista definitiva del público y la crítica se dio a través de Veneer, su álbum debut como solista que salió disparado al Top Ten británico. Sus continuas apariciones en diversas radios inglesas ofreciendo entrevistas y mini recitales exclusivos le permitieron acercarse a una enorme cantidad de público. Su repercusión comercial consta al punto tal que Heartbeats (primer corte del álbum que en realidad es un cover de The Knife, una banda sueca) ha sido utilizado para musicalizar un comercial de Sony para su producto Bravia.(*)

(*)http://www.lastfm.es/music/Jos%C3%A9+Gonz%C3%A1lez/+wiki


A continuación presentamos una muy buena canción del album Veneer, la mejor de este, a mi juicio. Se trata de un cover del mismo nombre, de la banda sueca the knife, que fue lanzada inicialmente en formato dance a eso de los 70's. El video que compartimos es una publicidad de la marca de productos electrónicos Sony, que tomó la canción como fondo musical del aviso.

Jose Gonzalez, un artísta argonáutico.



Shots (Poesía por: Allan Corvis)



SHOTS

*


Solo recuerdo de ti
y de esa violenta mirada,
el querer reposar allí,
hacer de tu vida
Mi morada.
Te miré y conjugue en una mirada
todo lo que deseaba de ti.
Esas oscuras intenciones dulces
mi deseo egoísta de ser feliz,
y esos ojos verdes

que caminaban.

*
Aquel día ruin
en que atravesé el salón hasta tus ojos
y valiente evadiste la distancia
Y me sostuviste,
Digo,
sostuviste esa mirada
en un valiente acto de cobardía.
Porque mirar
es desear en silencio,
porque mirar es poseer
solo viento.




CORVIS 2010.


jueves, 10 de junio de 2010

Sideral ( Poema en prosa por: Ambrose D'argé)




SIDERAL 

Cada seis mil años se da lugar en el cielo un espectáculo de proporciones universales.  Por alguna extraña razón, todos los planetas que conforman nuestra galaxia se alinean  perfectamente entre sí produciendo una poderosa estela de luz, apreciable solamente desde nuestro remoto planeta. Es una luz tan poderosa que es preciso observarla con cuidado, no sea que el fulgor pueda oscurecernos para siempre la mirada.
Un día llegué, o ella llegó, no lo recuerdo. Pero fue una colisión de galaxias. Lo que sí logro recordar es que aquella primera vez que la vi, supe inmediatamente que sería mía. Supe en ese momento que ella había llegado para quedarse, y entonces ocurrió. No supe como acercarme, el destello encandiló mi mirada. Ella es su propio sol. Es un nuevo sol sobre este universo. 

Ocurre en la vía láctea, cada seis mil años, que un hombre llega a amar tanto a una mujer, que sin saberlo logra desatar en el cielo el mas grande espectáculo del universo, alineando por completo todos los planetas del sistema, y consumando en esa maravillosa pirotecnia, el evento sideral de un amor. 

Lo supe enseguida. Lo supe desde el primer momento. Desde aquel instante, primitivo y ancestral en que las miradas se cruzaron como espadas en el fragor de la batalla. No hubo preámbulos. No hubo tiempo para ello. Tú me esperabas sin saberlo. Me deseabas como el agua a la sed, para ser devorada, pero no como devora una fiera a su presa, sino como devora el fuego a la madera, así de lenta y deliciosamente.  Entonces te invité a bailar y tú temías. Temías los susurros desde la oscuridad. Desde ese rincón sombrío de la sala de baile, de donde refulgían amenazantes los ojos brillantes de los animales de presa, de los implacables carroñeros.
Y ahí estabas, tratando de entenderte, tratando de abarcarte en tu voz, como si acaso pudieran tanto las palabras. Allí estabas como un faro que oculta el atardecer, que se ve rodeado de esa sustancia naranja que es una puesta de sol. Entonces te vi, o te escuché que para mí es lo mismo, igual de perfecto, de sobrenatural.



Para una mujer, que es una gema.


D'argé. 2010

domingo, 6 de junio de 2010

John Donne, un poeta Mayor.

John Donne



Les traeré en esta ocasión a otro poeta de fuego. John Donne (1572- 31 de marzo de 1631).

Si Quevedo en España, entonces Donne en Inglaterra. Su poesía se caracteriza por la brutalidad de su mensaje, además de la riqueza en sugerencias y metáforas, su riqueza linguistica, teniendo en cuenta el pragmatismo de la lengua anglosajona que de cierta forma limita la imaginacion creativa y estética de los autores. Pero en Donne, como en Shakespeare tales limites, son suplidos por la sencillez de las palabras, y la belleza de las ilustraciones.

Uno de sus mas famosos poemas, la meditacion XVII, fuela  inspiración para que Ernest hemimgway titulara su obra maestra, "Por quien doblan las campanas".

escribió Donne:

"Nadie es una isla, completo en sí mismo; 
cada hombre es un pedazo de continente, 
una parte de la tierra.; 
si el mar se lleva una porción de tierra,
toda Europa queda disminuida, 
como si fuera un promontorio,
o la casa de uno de tus amigos,
o la tuya propia. 
La muerte de cualquier hombre me disminuye 
porque estoy ligado a la humanidad;
por consiguiente nunca hagas preguntar
por quién doblan las campanas: 
doblan por ti"



les comparto entonces algunos poemas de la extensa obra de este magnífico autor.




Alquimia de amor

Algunos que más hondo que yo en la mina del amor han excavado
dicen dónde se halla su céntrica felicidad.
         Yo he amado, y poseído, y relatado,
mas, aunque hasta la ancianidad amara, poseyera y refiriera,
ese misterio escondido no habría de encontrarlo.
         Todo, ¡ay!, es impostura.
Y como ningún alquimista obtuvo aún el elixir,
         mas su marmita repleta glorifica
         si por casualidad
algo odorífero o medicinal le sobreviene,
   así un deleite pleno y prolongado sueñan los enamorados,
   para obtener una noche de estío, de apariencia invernal.

Por esta vana sombra de burbuja ¿habremos de entregar
nuestro bienestar, esfuerzo, honor y vida?
         ¿En esto amor termina? ¿puede cualquiera
tan feliz ser como yo si soportar puede
la burla breve de una representación de novio?
         Ese infeliz amante que asegura,
no es la médula del cuerpo; es de la mente,
         lo que él en ella angelical encuentra,
         igual jurar podría que escucha en el rudo,
crudo, griterío de ese día, las esferas.
   No esperes hallar inteligencia en la mujer: a lo sumo,
   dulzura e ingenio; momias , sólo, poseídas.
Versión de Purificación Ribes


Amor negativo



Nunca tanto me abatí como aquellos

que en un ojo, mejilla, labio, hacen presa;

   Rara vez hasta aquellos que más no se remontan

   que para admirar virtud o mente:

pues sentido e inteligencia pueden

   conocer aquello que su fuego aviva.

Mi amor, aunque ignorante, es más audaz.

Fracase yo cuando suspire,

si he de saber qué desearé.



Si es simplemente lo perfecto

lo que expresarse no se puede

   sino con negativos, así es mi amor.

   Al todo que todos aman digo no.



Si quien descifrar puede

   aquello que desconocemos, a nosotros, conocer puede,

enséñeme él esa nada. Ëste, por ahora,

mi alivio es y mi consuelo:

aun cuando no progreso, fallar no puedo.


El mensaje

Devuélveme mis ojos largamente descarriados,
pues es ya mucho el tiempo que han estado sobre ti;
mas ya que tales males allí han aprendido,
     tales conductas forzadas
     y apasionamiento falso,
         que por ti
         nada bueno
pueden ver, quédatelos para siempre.

Devuélveme mi corazón inofensivo,
que pensamiento indigno no podría mancillarlo,
pero si el tuyo le enseñara
     a burlarse
     del amor;
          a quebrantar
          palabra y juramento,
quédatelo, porque mío no será.

Pero devuélveme mi corazón, mis ojos,
que pueda ver y conocer tu falsedad;
que pueda reírme y gozar
     cuando te angusties,
     cuando languidezcas
          por aquel
          que no querrá,
o, como tú ahora, falso sea.
Versión de Purificación Ribes

  

La prohibición

Guárdate de quererme.
Recuerda, al menos, que te lo prohibí.
No he de ir a reparar mi pródigo derroche
de aliento y sangre en tus llantos y suspiros,
siendo entonces para ti lo que tú has sido para mí.
Pues goce tan intenso consume al punto nuestra vida.
Así, a fin de que tu amor frustrarse no pueda por mi muerte,
si tú me amas, guárdate de quererme.

      Guárdate de odiarme,
o de excesivo triunfo en la victoria.
No es que yo a mí mismo haga justicia,
y me resarza del odio con más odio,
pues tú el título perderás de conquistador
si yo, tu conquista, perezco por tu odio.
Así, a fin de que mi ser a ti en nada perjudique,
si tú me odias, guárdate de odiarme.

        Mas ama y ódiame también.
Así ambos extremos la función de ninguno cumplirán.
Ámame para que pueda morir del modo placentero.
Ódiame, porque tu amor es excesivo para mí,
o deja que los dos mutuamente, y no a mí, se destruyan.
viviré entonces para apoyo y triunfo tuyo.
Así, para que tú a mí, a tu amor y odio no destruyas,
déjame vivir, pero ama y ódiame también.

Versión de Purificación Ribes
 
***

Corvis 2010.